Crónicas de un paisano observador

Ya estoy aquí...

Queridos lectores míos,

He de comunicaros que he estado ausente y bastante disperso durante casi el último mes. Realmente, el motivo por el cual no he posteado, no es otro que he estado en mi tierra, Euskadi, aprovechando que la universidad nos daba vacaciones. Estas casi cuatro semanas - 3 y algún día para ser más exactos, desde el 24 de Marzo hasta el martes de esta semana- me han servido para ver a la gente que ya empezaba a echar en falta: familia, amigo/as, compañero/as de trabajo, etc....

A pesar de mantener contacto casi a diario vía e-mail o teléfono, para mí ha sido muy gratificante volver a encontrarme con todos a los que realmente aprecio...ver sus caras, escuchar la voz a escasos metros y comprobar que todo está en correcto orden. ¡No tiene palabras!Es verdad que no es lo mismo conversar por teléfono que hacerlo personalmente. No es lo mismo cartearse por e-mail (¡a veces mis extensos mails son comparados con el Quijote!)..... que comentarlo personalmente... Por eso, la distancia y la añoranza, a veces son buenas compañeras de viaje; otras veces, en cambio, es mejor evitarlas....

Otro de los factores determinantes ha sido la luz solar. Como está realmente comprobado, los que estamos por tierras norteñas como Bélgica, sabemos que en invierno el Sol se apaga sobre las 17.00, aún cuando estamos en Marzo, época del año en el que en mi tierra se nota considerablemente la duración de la luz solar. El simple hecho de tener más luz solar me ha fortalecido mucho, sobre todo a nivel personal.

Para finalizar me gustaría decir que esta estancia durante estas semanas ha sido como un pequeño empuje y así aguantar hasta las vacaciones de verano...lo que se dice, animar, aunar fuerzas. Eso sí, me he traído conmigo un trozo de cada uno, para que, en los momentos difíciles me ayuden en lo mejor posible.



Hasselt, 17th April,

Le Txikito.

2 Comments:

Anónimo said...

Como lo hiciera un turista has descrito nuestra tierra, no tengo más remedio, o no tengo más deseo que aprovechar esas tres horas de sol de más que tenemos.

Milesker.

Lirovi said...

Es cierto que la luz del sol es tan tan diferente!!! Y comparto contigo el placer de reencontrar amigos y familia. Un mes mola, yo cada vez que vuelvo como mucho es una semana..., y es mas bien agotador. tanta gente por ver!!!

Buen regreso... Saludos

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